El Topillo de campo mediterráneo (Microtus lavernedii), en comparación con el Topillo lusitano (Microtus lusitanicus) y el Topillo de los Pirineos (Microtus gerbei), es notablemente más grande, tiene los ojos y las orejas más grandes y su pelo es más largo. Además, es más fácil de observar en superficie que esas otras dos especies, habitualmente en zonas con herbáceas o juncos, aunque gran parte de su actividad es subterránea. Su actividad superficial disminuye hasta desaparecer en períodos de heladas y sequías. Y aunque tienen actividad diurna, como la mayoría de los micromamíferos, son más activos durante el amanecer, el atardecer y por la noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario