Astapekatu es una cueva sepulcral con una bonita boca arqueada de 2,10 metros de anchura, 0,70 de alto y 12 de largo. Se denomina cueva sepulcral a aquella que fue usada por nuestros antepasados para realizar inhumaciones colectivas desde el Neolítico hasta la Romanización en gran parte de Europa. En el artículo "Las cuevas sepulcrales en el País Vasco", publicado en el año 1990 en la revista Munibe (Antropologia-Arkeologia), Ángel Armendáriz catalogó 230 cuevas sepulcrales en el País Vasco, en general pequeñas, de techos bajos o de acceso difícil. En el artículo "Cuevas y megalitos: los contextos sepulcrales colectivos en la Prehistoria reciente cantábrica", publicado en el año 2005 en la revista Munibe (Antropologia-Arkeologia), Roberto Ontañón y Ángel Armendáriz concluyen que los hombres primitivos usaron al mismo tiempo y en los mismos lugares dólmenes y cuevas sepulcrales, pero que los datos cronológicos sugieren que hubo una evolución lenta y progresiva desde el uso de megalitos funerarios hasta el de cuevas sepulcrales.
José Mari Olabarri recuerda perfectamente al cura de Okendo, Félix Murga, y cómo este le explicó que había encontrado huesos y dientes humanos en la cueva de Astapekatu. Félix Murga dio noticia de su descubrimiento en el artículo "Hallazgos arqueológicos en el Gorbea vizcaíno: Cueva de Astapekatu, cueva de Motasabide'ko Axpea y túmulo de Egalazaburu, Orozko (Vizcaya)", publicado en el año 1979 en el número 9 de la revista Kobie, editada por la Diputación Foral de Bizkaia. En la fotografía se ve el gran Tejo (Taxus baccata) bajo el que se sitúa la cueva de Astapekatu.
José Mari Olabarri recuerda perfectamente al cura de Okendo, Félix Murga, y cómo este le explicó que había encontrado huesos y dientes humanos en la cueva de Astapekatu. Félix Murga dio noticia de su descubrimiento en el artículo "Hallazgos arqueológicos en el Gorbea vizcaíno: Cueva de Astapekatu, cueva de Motasabide'ko Axpea y túmulo de Egalazaburu, Orozko (Vizcaya)", publicado en el año 1979 en el número 9 de la revista Kobie, editada por la Diputación Foral de Bizkaia. En la fotografía se ve el gran Tejo (Taxus baccata) bajo el que se sitúa la cueva de Astapekatu.
Tomé estas fotografías el 25 de enero de 2013, en compañía de mi amigo David Redondo. Nos indicó su localización mi amigo Jose Mari Olabarri, con el que nos encontramos casualmente cerca de allí. El "rubio" de Urigoiti tiene 77 años y ha sido fuente de información para dos generaciones de etnógrafos, espeleólogos o lingüístas, además del protagonista del libro "El último pastor de Itxina".
Localización de la cueva sepulcral de Astapekatu en el Macizo de Itzina, municipio de Orozko (Bizkaia). Pinchad en la imagen para verla más grande.
2 comentarios:
Un blog super interesante por la cercanía que me toca. Gracias por la dedicación y divulgación de nuestro maravilloso entorno.
Muy interesante gracias,saludos
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