La Culebra de agua o viperina (Natrix maura) es fácil de distinguir por sus hábitos acuáticos, su cabeza de gran anchura y su diseño dorsal, algunas veces con una amplia banda oscura en forma de zigzag y otras veces, caso del ejemplar de las fotografías, con una doble banda de manchas romboidales que, en su combinación, genera bandas transversales o un dibujo ajedrezado. Ante un posible depredador, adopta una postura similar a la de las víboras, de ahí su nombre de Culebra viperina. Entonces dilata la anchura de sus mandíbulas, convirtiendo su cabeza en triangular, se enrolla sobre sí misma, bufa y amaga con ataques, llegando a golpear con su hocico y, más raramente, a morder. Carece de veneno. Como la Culebra de collar, al ser capturada, libera un líquido de olor nauseabundo a través de la cloaca.
La Culebra de agua se alimenta principalmente de anfibios y peces, seleccionando presas grandes. Para elevar su temperatura corporal se asolea en la orilla de los cursos fluviales o masas de agua donde busca su alimento. Es capaz de cazar a sus presas acechándolas dentro del agua, sujeta a algún elemento con la parte posterior de su cuerpo, permaneciendo bajo el agua durante más de 15 minutos. Es habitual que tras la captura saque a la presa fuera del agua para tragársela entera. En el Parque Natural de Gorbeia es escasa, ya que los cursos altos y arroyos de aguas rápidas y frías no son su hábitat óptimo, dado su carácter mediterráneo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario