24 de septiembre de 2021

Nutria paleártica

La Nutria paleártica (Lutra lutra) es, junto a la Marta europea (Martes martes), un mamífero carnívoro en franca recuperación desde que en la década de los años 70 del pasado siglo alcanzara su mínimo poblacional debido a su intensa persecución por el valor de la piel. El padre de mi amigo Aitor Uriarte hacia el año 1960 se cruzó con un cazador de Ortuella que llevaba dos nutrias que había matado en las marismas del Barbadún, justo donde en el año 1968 se construyó la refinería de Petronor. Más recientemente, en el año 1978 o 1979 un guarda del ICONA mató una nutria en el río Cadagua, en el tramo entre La Herrera y Balmaseda (municipio de Zalla) con la escusa de que se comía las truchas.Desde entonces la Nutria ha ido recolonizando ríos de los que se extinguió, siempre que estos no estén muy afectados por la destrucción de su hábitat, la disminución de sus presas y la contaminación. En la mayoría de los cursos fluviales de la vertiente cantábrica del País Vasco la disminución de sus presas debe ser un factor importante, ya que la destrucción de los frezaderos de los peces por los arrastres de tierra desde las matarrasas es un fenómeno generalizado. En otros territorios se conocen poblaciones de nutrias en ríos moderadamente contaminados en los que los peces consiguen reproducirse con normalidad y son abundantes. El 19 de junio de 2020 apareció un individuo muerto por atropello en la carretera entre Uribiarte (Orozko) y Bergantza (Amurrio), ya en territorio alavés, cerca del río Altube. Tomé esta fotografía de un ejemplar salvaje el 19 de septiembre de 2021.
La Nutria paleártica según el vigente Catálogo Vasco de Especies Amenazadas es una especie "en peligro de extinción". Es decir, se encuentra en la categoría de máxima protección. En el libro "La nutria (Lutra lutra) en España", editado por el ICONA en el año 1990, Alberto Hernando Ayala, referido al río Nervión a su paso por Álava, escribió que "los trabajos de campo se han realizado en el verano y otoño de 1984 y ocasionalmente a lo largo de 1985 y 1986...Este río es canalizado en la zona de Orduña, al poco de nacer, y desde ese punto va sufriendo una paulatina contaminación. No se han encontrado señales de nutria en el mismo y es muy improbable que la especie exista allí...En general, el mustélido se puede considerar casi extinto y con mínimas posibilidades de supervivencia en esta cuenca cantábrica", mientras que Iñigo Mendiola para Bizkaia en el mismo libro escribió que "como en el caso de otras provincias vascas, la realización del sondeo sobre la nutria coincidió en el tiempo con la finalización del atlas de vertebrados terrestres publicado en 1985. En ninguno de los dos trabajos ha sido posible detectar la presencia de la nutria en la provincia...La conclusión de nuestro trabajo es que la nutria ha desaparecido de Vizcaya, pese a que en un libro publicado en 1970 se citaba su presencia en 14 localidades vizcaínas. La contaminación de extensos tramos de los ríos de la provincia y la fuerte alteración de los hábitats fluviales han sido, sin duda, importantes factores desfavorables para la nutria en Vizcaya, donde los dragados y canalizaciones poco respetuosos con el medio natural han tenido especial incidencia tras las graves inundaciones de agosto de 1983." Sin embargo, con esos factores actuando con la misma intensidad, mi amigo Iñigo Zuberogoitia vio y fotografió las huellas de una nutria adulta junto a un cachorro en la orilla del río Nervión aguas abajo de Laudio (Araba), donde el 15 de febrero de 2017 tomé estas fotografías de huellas.
Como expliqué en "Vertido de aguas residuales al río Nervión", un gran volumen de aguas residuales se sigue vertiendo al río Nervión sin depurar. En concreto, las aguas residuales urbanas de 35.000 personas (municipios de Amurrio, Aiara, Laudio y Orozko) más un gran volumen aguas residuales de origen industrial. Así y todo, la Nutria ha recolonizado el río Nervión aguas abajo de Laudio. En el libro antes referido, Juan Jiménez y Miguel Delibes escribieron que "la persecución directa no es la principal responsable de la desaparición de la especie". En el libro "La nutria en España ante el horizonte del año 2000, editado en 1998, Jordi Ruiz-Olmo, Juan Jiménez, Santiago Palazón, Miguel Delibes, Carlos Bravo y Félix Bueno insisten en la idea de que "la muerte directa de individuos a manos del hombre, pese a su contribución a la regresión, no ha sido, ni es, la principal amenaza para la especie en nuestro país." En dicho libro, para Araba Alberto Hernando y Andrés Illana escribieron que "una novedad negativa es el hecho de no habérsela encontrado en los últimos reductos cantábricos del Valle de Ayala, perteneciente a la cuenca del Nervión". Para Bizkaia Esteban Camacho e Iñigo Zuberogoitia escribieron que "no se ha localizado ningún tipo de señal que indique la presencia de nutrias en ninguna de las estaciones prospectadas en toda la provincia, idéntico resultado que hace 10 años antes. Además, para que pudiese darse una recolonización desde las poblaciones más cercanas se requeriría de un corredor natural medianamente conservado, lo cual no existe en la provincia". 
Sin embargo, Javier López de Luzuriaga en su artículo "Vuelve la nutria a la vertiente Cantábrica del País Vasco", publicado en el número 18 de la revista Galemys en el año 2007, explicó que se habían recogido excrementos "en varios puntos del río Izoria perteneciente a la cuenca del Nervión, en el municipio de Ayala-Aiara, entre las localidades de Maroño e Izoria", que resultaron ser de un mismo ejemplar del que más tarde también recogieron muestras de excrementos en el río Tumecillo a su paso por el pueblo de Osma, municipio de Valdegovía, tras recorrer 20 kilómetros hacia el sur y ascender más de 700 metros de desnivel en Sierra Sálvada, según lo expuesto en el informe "Puesta a punto de un método de censo para la nutria (Lutra lutra), mediante el análisis molecular de excrementos en Álava" y en el libro citado en el siguiente párrafo. En el libro "La Nutria en España. Veinte años de seguimiento de un mamífero amenazado", publicado en el año 2008, Javier López de Luzuriaga, Iñigo Zuberogoitia y Jabi Zabala en el resumen del capítulo "La nutria en el País Vasco" escribieron que "no existen datos de su presencia en Bizkaia, Gipuzkoa y en el norte de Álava", aunque en el apartado "Perspectivas futuras y recomendaciones para la conservación" indicaron que "existen posibilidades de recolonización de algunas cuencas cantábricas por parte de la nutria en un futuro próximo. Especialmente del Bidasoa en Gipuzkoa por parte de animales provenientes de Navarra y de las cuencas del Carranza y Nervión en Bizkaia por animales de Cantabria, norte de Burgos y Álava". La capacidad de recuperación de esta especie parece no tener fin y su adaptabilidad a cursos fluviales tan alterados como el río Nervión es sorprendente. Tal vez para su recuperación natural solo ha necesitado que desapareciese su captura con fines peleteros, que es posible que haya sido una de las principales causas de su declive pasado, aunque los expertos, como queda escrito, han estado de acuerdo en darle poca importancia. En cualquier caso, las muertes directas debieron ser muy superiores al máximo de 100 nutrias cazadas anualmente en España que estimó en el año 1983 Miguel Delibes.

2 comentarios:

Jon dijo...

Parece ser que está volviendo a colonizar los rios de Bizkaia y Gipuzkoa. Durante el confinamiento salió publicada una noticia de la presencia de una nutria comiendo un pez a la altura de la Peña en Bilbao. Este año otra nutria se metió en una tienda en Zumaia. Quizá las administraciones tendrían que desarrollar algún plan para su reintroducción en los ríos Cantábrico de los que desaparecieron como Urdaibai, Butrón o Lea Artibai.

Juan Manuel Pérez de Ana dijo...

Los proyectos de reintroducción son útiles para especies que se expanden con dificultad. No es el caso de la nutria, que en muy pocos años se ha expandido ampliamente desde el momento de su protección. Fue muy perseguida por el dinero que se pagaba por su piel.